El presidente Alberto Fernández anunció este miércoles un paquete de medidas económicas destinadas a estabilizar la situación financiera del país. La conferencia de prensa, realizada en la Casa Rosada, buscó dar respuesta a la creciente inflación y la devaluación del peso argentino.
Entre las principales iniciativas se destacan:
- Un congelamiento de precios por 90 días en una canasta básica de productos. El gobierno negoció estos acuerdos con los principales supermercados y empresas de consumo masivo.
- Un aumento del 20% en las jubilaciones y asignaciones sociales a partir del 1 de enero de 2026. Esto busca proteger el poder adquisitivo de los sectores más vulnerables.
- Un programa de créditos blandos para la adquisición de viviendas y electrodomésticos. Se destinarán $50.000 millones en líneas de financiamiento accesibles.
- Un esquema de retenciones móviles a las exportaciones de granos y carne, con el objetivo de contener la suba del dólar.
"Entendemos la preocupación de los argentinos por la inflación y la inestabilidad cambiaria. Por eso hemos diseñado este plan de choque para dar respuestas concretas en el corto plazo", afirmó el mandatario.
Las medidas anunciadas se suman a los recientes aumentos salariales en el sector público y privado, así como al congelamiento de las tarifas de servicios públicos hasta marzo del próximo año.
El ministro de Economía, Sergio Massa, también participó de la conferencia y detalló los alcances y tiempos de implementación de cada una de las iniciativas. "Estamos trabajando arduamente para recuperar la estabilidad y el poder adquisitivo de los ingresos", señaló.
Las reacciones de la oposición no se hicieron esperar. Diversos referentes criticaron la "improvisación" y "falta de un plan integral" por parte del Gobierno. Sin embargo, desde el oficialismo resaltaron que estas medidas son "el puntapié inicial" de una estrategia más amplia que se irá desplegando en los próximos meses.











