El gobierno de China condenó enérgicamente la reciente incautación por parte de Estados Unidos de dos petroleros venezolanos que transportaban crudo a China, calificándola como una "grave violación al derecho internacional".
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, declaró que Venezuela "tiene derecho a desarrollar relaciones con otros países" y que la captura de estos buques cerca de las costas venezolanas constituye una acción ilegítima. Beijing se opone "sistemáticamente a las sanciones unilaterales ilegales que carecen de fundamento en el derecho internacional", agregó.
Según informaron las autoridades estadounidenses, el pasado 20 de diciembre fue incautado el petrolero "The Centuries", cargado con aproximadamente 1,8 millones de barriles de crudo venezolano con destino a China. Esta fue la segunda incautación en cuestión de días, luego de que el 10 de diciembre se decomisara otro buque llamado "Skipper", ambos presuntamente parte de la "flota fantasma" de Venezuela para transportar petróleo sancionado.
Estados Unidos justificó estas acciones alegando que se trata de una lucha contra el narcotráfico y el "régimen narcoterrorista" del presidente venezolano, Nicolás Maduro. Sin embargo, el diario The New York Times señaló que "The Centuries" no figura en la lista de petroleros sancionados por el Departamento del Tesoro estadounidense.
China es el principal comprador de crudo venezolano, que representa alrededor del 4% de sus importaciones totales. El gobierno chino ha sido un aliado clave de Venezuela y se ha opuesto reiteradamente a las sanciones unilaterales impuestas por Estados Unidos contra el país sudamericano.
Estas incautaciones se dan en un contexto de crecientes tensiones entre Washington y Caracas, tras el despliegue naval que Estados Unidos inició en el Caribe el pasado agosto, seguido de ataques contra supuestas narcolanchas en la región.
