Tras perder un litigio ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por las restricciones impuestas a las exportaciones de productos lácteos y agrícolas de Costa Rica, Panamá ha decidido apelar la decisión del organismo internacional.
El 5 de diciembre de 2024, la OMC falló a favor de Costa Rica, determinando que las medidas adoptadas por Panamá "no están basadas en principios científicos y se mantienen sin testimonios científicos suficientes". Sin embargo, en lugar de acatar el fallo, Panamá optó por apelar, dejando en suspenso la resolución del conflicto comercial entre ambos países.
El ministro de Comercio Exterior de Costa Rica, Manuel Tovar, lamentó la decisión de Panamá, calificándola como "un acto temerario y de mala fe". Según Tovar, las relaciones entre ambos países han sido históricamente positivas, pero esta situación los tiene "frustrados" por el "tratamiento" que han recibido.
El litigio en la OMC se remonta a junio de 2021, cuando Costa Rica presentó una demanda por las restricciones impuestas por Panamá a la importación de diversos productos, entre ellos lácteos, carnes, frutas y verduras. Tras las audiencias realizadas a finales de 2022, la OMC falló a favor de Costa Rica, ordenando a Panamá que pusiera sus medidas en conformidad con las obligaciones del Acuerdo de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias.
Sin embargo, en lugar de acatar la decisión, Panamá ha optado por apelar, lo que deja en suspenso la resolución del conflicto. Según Tovar, Costa Rica había propuesto soluciones consensuadas y mecanismos de arbitraje, pero Panamá los rechazó.
Ahora, el futuro de las exportaciones costarricenses a Panamá queda en una situación de incertidumbre, mientras ambos países se preparan para una nueva etapa de negociaciones y disputas en el ámbito comercial.











