La mujer que protagonizó el escándalo de la 'kiss cam' de Coldplay en 2022 aún no se ha recuperado de aquel incidente y confiesa que actualmente se encuentra desempleada y sufriendo acoso.
Kristin Cabot, de 53 años, era la directora de Recursos Humanos de una empresa que la despidió después de que fuera sorprendida abrazada con su amante durante un concierto de la banda británica en Boston. En una entrevista con el diario británico The Times, Cabot lamenta haber perdido amistades y relaciones familiares tras aquel suceso, que tuvo un impacto planetario.
Según Cabot, el acoso no termina nunca. Afirma que siente las miradas y los comentarios de extraños en la calle, e incluso sus propios hijos le piden que no vaya a buscarlos a la escuela o a las actividades deportivas. "Están furiosos conmigo. Y puede que lo estén el resto de su vida. Tengo que aceptarlo", dice.
La mujer también se siente "triste" por el hecho de que ni Chris Martin, el cantante de Coldplay, ni nadie en la banda se haya puesto en contacto con ella ni hayan realizado declaraciones que pudieran haberle ayudado a superar aquel suceso. De hecho, recuerda que Martin, al ser preguntado por el incidente, dijo en tono desenfadado que "cuando la vida te da limones, no te queda sino hacer limonada".
Cabot cree que, como mujer, siempre se lleva la peor parte del abuso, y lamenta haber sido descrita como una arribista por su romance con el CEO de la compañía. "¡Con la cantidad de sacrificios que yo he tenido que hacer en mi carrera, la cantidad de manos que tuve que sacarme del trasero a lo largo de los años y los comentarios que tuve que aguantar de los hombres!", reflexiona.
Finalmente, Cabot concluye que se ha convertido en "un meme, la más maléfica directora de Recursos Humanos de la historia de los Recursos Humanos".











