El gobierno israelí anunció este domingo la aprobación de otros 19 asentamientos en Cisjordania ocupada, con el objetivo declarado de impedir la creación de un "Estado palestino terrorista". Esta medida se enmarca en un contexto de intensificación de la colonización desde el 7 de octubre de 2023, cuando estalló una nueva ola de violencia en la región.
Con esta decisión, el total de asentamientos autorizados en los tres últimos años asciende ya a 69, según un comunicado publicado por los servicios del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich. Naciones Unidas ya había alertado sobre el crecimiento récord de las colonias israelíes en Cisjordania, consideradas ilegales por la legislación internacional.
"El gabinete aprobó la propuesta del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Defensa, Israel Katz, de declarar y formalizar 19 nuevos asentamientos en Judea y Samaria", indicó en un comunicado la oficina de Smotrich, utilizando la terminología habitual en Israel para referirse a Cisjordania, ocupada desde 1967.
Smotrich, colono y exponente de la derecha nacionalista religiosa, señaló que la iniciativa busca sabotear la creación de un Estado palestino. "A pie de terreno, estamos bloqueando la creación de un Estado palestino terrorista. Seguiremos desarrollando, construyendo y poblando la tierra de nuestra herencia ancestral, con confianza en la justicia de nuestro camino", indicó.
Aparte de Jerusalén oriental, la parte de mayoría árabe ocupada y anexionada por Israel, más de 500.000 israelíes viven actualmente en las colonias en Cisjordania, junto a tres millones de palestinos.
De las 19 colonias presentadas el domingo, cinco son asentamientos ya existentes desde hace años, es decir, colonias implantadas en territorio palestino sin haber obtenido las autorizaciones necesarias de las autoridades israelíes. Dos de ellas, Ganim y Kadim, en el norte de Cisjordania, serán reinstaladas después de haber sido desmanteladas hace dos décadas.
Desde que Israel tomó Cisjordania en la Guerra de los Seis Días en 1967, la colonización ha avanzado con todos los gobiernos, de izquierda como de derecha. Sin embargo, se intensificó con el actual gobierno de Benjamin Netanyahu, y en particular desde el inicio de la guerra en Gaza, desatada por el ataque sorpresa del movimiento islamista Hamás en Israel el 7 de octubre de 2023.
En un informe del secretario general de la ONU consultado a mitad de diciembre, se indicaba que el crecimiento de las colonias israelíes alcanzó en 2025 un nivel récord desde que Naciones Unidas empezó a hacer un seguimiento en 2017. "Condeno la expansión implacable de la colonización israelí en Cisjordania ocupada, incluyendo Jerusalén oriental (...) que amenaza la viabilidad de un Estado palestino totalmente independiente, democrático, con continuidad territorial y soberano", insistía António Guterres en ese documento.
El avance de la colonización se ve acompañado además de un incremento "alarmante" de la violencia de los colonos contra los palestinos, denunció también Guterres en el documento. El secretario general mencionó que a veces se producen ataques "en presencia o con el apoyo de las fuerzas de seguridad israelíes".
La violencia en este territorio explotó desde el 7 de octubre de 2023. Más de un millar de palestinos, entre ellos combatientes pero también numerosos civiles, murieron desde entonces en Cisjordania a manos de soldados o colonos israelíes, según un recuento de la AFP establecido en base a datos de la Autoridad Palestina. Al mismo tiempo, y según datos oficiales del Estado hebreo, al menos 44 israelíes, incluidos civiles y soldados, murieron en Cisjordania en ataques palestinos o en incursiones militares israelíes.
Los nuevos proyectos de colonización suelen provocar condenas internacionales. Francia dice ver en ello una "amenaza existencial" a la emergencia efectiva de un Estado palestino. A fines de septiembre, el presidente estadounidense Donald Trump avisó de que no permitiría a Israel anexionarse Cisjordania, a pesar de su firme apoyo al Estado hebreo.











