Vista Alegre, la localidad de Neuquén que este 2025 celebró su 30 aniversario como municipio, tiene una rica historia de arraigo y tradición que se refleja en personajes como Gabino Jofré y Malvina Reyes. Estos íconos de la identidad local representan el espíritu de una comunidad que supo crecer junto al desarrollo del dique y el río Neuquén, convirtiéndose en un referente de la región.
La creación de la bandera de Vista Alegre y la llegada del asfalto a varias arterias relevantes son hitos que marcan el progreso de este antiguo campamento modelo, que se independizó luego de ser una colonia. Pero más allá de los avances materiales, la esencia de Vista Alegre se encuentra en sus habitantes y en la herencia de personajes como Jofré y Reyes, cuyas vidas y legado se entrelazan con la historia del lugar.
Gabino Jofré, un hombre culto y trabajador, se desempeñó como obrero de chacra y galpón de empaque, transmitiendo a sus hijos la importancia de tener una profesión. Por su parte, Malvina Reyes, abuela de la actual vecina Norma Reyes, se las ingenió para criar a sus hijos en las adversas condiciones rurales de su época. Ambos son íconos de la tenacidad y el arraigo que caracterizan a los habitantes de Vista Alegre.
La plazoleta "Gregoria Palma", bautizada en honor a la esposa de un vecino que cedió tierras para la fundación del Club Hípico "Riveras Neuquinas", es solo una muestra del legado que pervive en la memoria colectiva. Personajes como el ingeniero Ernesto Gramondo, quien llegó a la zona en 1886 y se quedó a vivir su propio desafío, también forman parte de la historia de este rincón de Neuquén.
Vista Alegre, con sus barrios Ruca Luhe, Reserva y Costa de Reyes, sigue fluyendo entre Neuquén y Río Negro, manteniendo viva la esencia de una comunidad que se forjó a la par del desarrollo del dique y el río. A 30 años de su emancipación, la localidad celebra su identidad y su historia, representada en figuras como Gabino Jofré y Malvina Reyes, íconos de la tenacidad y el arraigo local.
