Tras las modificaciones a la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación (LIGIE) impulsadas por la Secretaría de Economía, empresas globales con operaciones en México han expresado su respaldo a los objetivos de la reforma. Estas compañías señalan que es válido que, en un contexto internacional marcado por la subvaluación de mercancías y distorsiones que afectan el funcionamiento de los mercados, México refuerce sus herramientas de política comercial para proteger el empleo formal, la producción nacional y la integración productiva.
Las empresas destacaron que el fortalecimiento del Estado de Derecho y la existencia de reglas claras resultan indispensables para atraer inversiones de largo plazo. Sin embargo, advirtieron que la reforma debe tomar en cuenta la realidad productiva del país, ya que México es una economía abierta y altamente integrada a cadenas de valor regionales y globales, por lo que numerosas industrias dependen de insumos importados que no siempre cuentan con una oferta nacional suficiente en volumen, calidad o precio, especialmente en sectores estratégicos vinculados al T-MEC.
Las empresas reiteraron su disposición a colaborar con la Secretaría de Economía y otras dependencias en espacios de diálogo técnico, aportando información que contribuya a maximizar los beneficios de la reforma y a reducir riesgos para la competitividad del país. Consideran que el éxito de la política arancelaria dependerá de mantener un equilibrio entre el fortalecimiento del desarrollo industrial y la preservación de la integración regional y global que ha posicionado a México como una plataforma exportadora de largo plazo.
La reforma a la LIGIE tiene como objetivo frenar prácticas desleales de comercio internacional y generar condiciones de competencia más equitativas para quienes producen, invierten y generan empleo en México. Las empresas globales han expresado su apoyo a estos objetivos, pero advierten que la reforma debe considerar la realidad productiva del país y mantener un equilibrio entre el desarrollo industrial y la preservación de la integración regional y global.
