El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) de Costa Rica emitió un nuevo reglamento que regula los establecimientos dedicados a la crianza y comercialización de mascotas. El objetivo es mejorar el bienestar animal y fortalecer los controles sanitarios en un sector que hasta ahora carecía de una normativa específica.
Según el ministro Víctor Carvajal, la falta de regulación permitió durante años prácticas inadecuadas en los criaderos, como el hacinamiento, la ausencia de seguimiento veterinario y la venta de animales muy jóvenes que no habían completado su esquema de vacunación. Esto ha provocado enfermedades y, en muchos casos, el abandono de las mascotas por parte de los compradores.
El nuevo reglamento, publicado mediante el Decreto Ejecutivo N. 45344-MAG, entrará en vigor a partir del 19 de diciembre y otorgará un plazo de seis meses a los criaderos para que puedan cumplir con los requisitos. Durante este periodo, el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) brindará capacitación sobre los procedimientos internos que deberán implementar.
Uno de los puntos clave del reglamento es que Senasa podrá aplicar medidas sanitarias, ordenar correcciones, suspender actividades o, en caso de riesgo para el bienestar animal, decomisar a los animales. En estos casos, los propietarios deberán asumir los costos asociados a la atención, alimentación, cuidado veterinario y manejo de los animales.
Actualmente, Costa Rica cuenta con cerca de 1,7 millones de perros y más de 700.000 gatos, una realidad que, según el ministro Carvajal, "exige reglas claras" para regular la actividad de los criaderos y comercializadores de mascotas.
Si bien el reglamento entra en vigor de inmediato, las autoridades otorgarán un periodo de adaptación de seis meses, con el fin de que los establecimientos puedan cumplir con los requisitos sin sanciones inmediatas y se pongan a derecho de forma gradual.











