El magistrado Fidel Torres Tasso acató la medida cautelar del Tribunal Constitucional (TC) que anuló el proceso de amparo interpuesto por la exfiscal de la Nación, Delia Espinoza. La decisión reconoce la supremacía del TC sobre el Poder Judicial en conflictos entre poderes del Estado.
Torres Tasso fundamentó su resolución en que el TC actúa como intérprete supremo de la Constitución y que sus dictámenes crean precedentes vinculantes que las demás instancias deben acatar. El juez determinó que el caso escapaba de su ámbito jurisdiccional, ya que el TC había admitido una demanda competencial de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) contra el Poder Judicial y declarado fundada una medida cautelar que anuló el proceso de amparo de Espinoza.
Torres Tasso explicó que la tramitación del amparo ya no era viable debido a que existe un claro conflicto entre poderes del Estado (JNJ y Poder Judicial) que el máximo intérprete de la Constitución ya se había pronunciado. Además, cuestionó la competencia de su judicatura para abordar y decidir este caso.
La suspensión del amparo representa un revés judicial para Espinoza, quien enfrentó un proceso de destitución por parte de la JNJ. Ahora, el conflicto institucional se resuelve a favor de la junta que la separó del cargo de fiscal de la Nación.
Esta decisión del juez constitucional pone de manifiesto la supremacía del Tribunal Constitucional sobre el Poder Judicial en la resolución de conflictos entre poderes del Estado. El TC, como máximo intérprete de la Constitución, tiene la facultad de emitir dictámenes vinculantes que deben ser acatados por las demás instancias judiciales.












