El Servicio de Contratación Pública (SCE) de Ecuador aplicó medidas preventivas a varias empresas por presuntas irregularidades en la comercialización de papel higiénico destinado a instituciones públicas. Según la información oficial, se detectaron inconsistencias entre el metraje anunciado y el metraje real del producto entregado.
Esta investigación se desencadenó luego de que varias entidades gubernamentales denunciaran que el papel higiénico adquirido no cumplía con las especificaciones técnicas contratadas. Al realizar un análisis exhaustivo, las autoridades encontraron que el metraje real del papel era inferior al informado por los proveedores.
"Hemos detectado serias irregularidades en la provisión de este insumo básico para las instituciones públicas. No vamos a tolerar que se engañe a los organismos del Estado y, por ende, a todos los ecuatorianos", declaró el director del SCE, Juan Pérez.
Las medidas preventivas aplicadas incluyen la suspensión temporal de los contratos, la retención de pagos pendientes y la inhabilitación de los proveedores implicados para participar en futuros procesos de contratación pública. Además, se abrieron investigaciones penales para determinar si hubo delitos como fraude, peculado o enriquecimiento ilícito.
"Es inaceptable que se lucren a costa de engañar al Estado. Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para sancionar a los responsables y recuperar los recursos públicos malversados", enfatizó el ministro de Economía, David Gómez.
La problemática del papel higiénico institucional ha generado gran indignación en la opinión pública ecuatoriana. Los ciudadanos exigen que se apliquen castigos ejemplares a los proveedores corruptos y que se implementen controles más estrictos para evitar que se repitan este tipo de abusos.
"Estamos hartos de que se roben el dinero de todos los ecuatorianos. Esperamos que esta investigación sirva de advertencia a quienes pretendan lucrar a costa del erario público", manifestó María Fernanda Rodríguez, presidenta de una asociación de consumidores.
Las autoridades aseguran que continuarán con las pesquisas y que no descansarán hasta sancionar a los responsables y recuperar los fondos públicos malversados. El escándalo del papel higiénico institucional ha puesto en evidencia la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y transparencia en las compras gubernamentales.










