Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, emitió una advertencia contundente al mandatario electo de Chile, José Antonio Kast, sobre el trato a los migrantes venezolanos en el país. Durante su programa televisivo "Con Maduro+", el gobernante venezolano calificó a Kast como "pinochetista convicto y confeso" y sentenció: "Cuidadito le toca un pelo a un venezolano".
La tensión entre ambos líderes se desató luego de que Kast, durante su campaña, hiciera de la inmigración irregular un eje central de su propuesta, tratándola como un problema de seguridad y control fronterizo. Kast había planteado la necesidad de "recuperar el control de las fronteras", en especial en el norte de Chile, y vinculó el ingreso irregular con delitos, presión sobre servicios públicos y pérdida de soberanía. Incluso, desde la frontera con Perú, Kast advirtió a los inmigrantes irregulares que tenían "111 días para dejar Chile voluntariamente" o serían detenidos y expulsados.
Ante estas declaraciones, Maduro salió al cruce y advirtió a Kast que "los venezolanos se respetan" y que la Constitución chilena debe garantizar los derechos de los migrantes. Además, invitó "con mucho respeto" a los venezolanos en Chile a regresar al país y anunció un plan especial de apoyo a través del programa "Vuelta a la Patria", coordinado por Delcy Rodríguez y Camilla Fabri.
La advertencia de Maduro se enmarca en un contexto de tensión regional por la crisis migratoria venezolana, que ha generado millones de desplazados en los últimos años. Países como Chile, Colombia, Perú y Ecuador han recibido una gran cantidad de migrantes venezolanos, lo que ha generado debates y posiciones encontradas sobre cómo abordar este fenómeno.
Kast, por su parte, ha sido criticado por su discurso duro y su propuesta de endurecer las políticas migratorias. Desde la oposición, se lo ha acusado de promover un "discurso xenófobo" y de aprovechar el tema migratorio con fines políticos.
La advertencia de Maduro a Kast es un claro mensaje de que Venezuela no tolerará ataques a sus ciudadanos en el exterior. El presidente venezolano dejó en claro que defenderá los derechos de los migrantes venezolanos, incluso si eso implica un enfrentamiento directo con el nuevo mandatario chileno.












