Yilmark Navarro Vásquez, un joven de 18 años proveniente de Sarapiquí, Costa Rica, ha demostrado que la pobreza no define el destino de una persona. Cuando Yilmark debía estar celebrando su graduación de noveno año, se encontró llorando porque no tenía zapatos ni pantalón para asistir a la ceremonia.
Sin embargo, esta dura experiencia se convirtió en el motor que lo impulsó a esforzarse el doble y lograr sus metas. Después de un arduo recorrido, Yilmark no solo se graduó, sino que también obtuvo su título de bachiller técnico medio en Producción Agropecuaria.
La historia de Yilmark comienza en Naranjal, un pequeño pueblo de Sarapiquí, donde creció enfrentando dificultades económicas. Cuando su familia se mudó a Talamanca, faltando poco para terminar el año escolar, Yilmark se vio obligado a tomar una difícil decisión: no asistir a su graduación de noveno año por no tener ropa adecuada.
"Yo llevaba buenas calificaciones, era de los mejores. Claro que quería estar ahí, recibir mi título bien ganado. Todo el año luchándolo", recuerda Yilmark, quien lloró desconsoladamente al tener que quedarse en casa ese día.
Sin embargo, esta experiencia marcó un punto de inflexión en su vida. Yilmark se propuso esforzarse el doble para no volver a pasar por una situación similar. Durante los siguientes tres años, se aplicó como nunca, manteniendo excelentes calificaciones y preparándose para las pruebas estandarizadas.
Finalmente, en 2023, Yilmark pudo asistir a su tan anhelada graduación, esta vez con toga, birrete y acompañado de su madre, Juana Vásquez, quien ha sido su mayor apoyo. "Uno aprende que las dificultades no nos definen. Lo que lo define a uno es la constancia", afirma Yilmark con una madurez más allá de sus años.
Ahora, Yilmark sueña con ingresar a la Universidad Nacional para estudiar Biología, o a la Universidad de Costa Rica, donde le atraen las carreras de Turismo y Educación Preescolar. Su historia es un claro ejemplo de que, con esfuerzo y perseverancia, se pueden superar los obstáculos y alcanzar los sueños, sin importar las condiciones de partida.
