Después de una pausa en noviembre, el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) retomará la distribución de sus beneficios de cupones de alimentos a partir de enero de 2026. Más de 40 millones de estadounidenses de bajos ingresos recibirán esta ayuda económica mensual.
La distribución de los pagos a través de la tarjeta EBT (Transferencia Electrónica de Beneficios) comenzará el 1 de enero en varios estados, incluyendo Alaska, Dakota del Norte, Rhode Island y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos. En la mayoría de los estados, los pagos se realizarán entre el 1 y el 5 de enero.
El monto transferido a cada tarjeta EBT se asigna dependiendo del número de integrantes del hogar. Una persona recibirá $298 dólares, mientras que un hogar de dos personas obtendrá $546 dólares. El pago máximo para una familia de cuatro personas alcanza los $994 dólares, y se suman $218 dólares por cada persona adicional.
Estos beneficios, conocidos como "cupones de alimentos", permiten a las familias de bajos ingresos comprar alimentos de la canasta básica en tiendas minoristas, mercados agrícolas y supermercados autorizados por el programa. Los fondos provienen del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) y tienen como objetivo garantizar la seguridad alimentaria en los hogares vulnerables.
Cada estado se encarga de distribuir los beneficios a las familias asociadas a SNAP de forma independiente, asignando las fechas de distribución según criterios internos, como el número de caso, el apellido o el número de Seguro Social del beneficiario.
Además de la reanudación de los pagos, el programa SNAP también ha realizado cambios recientes en las solicitudes y reglas para sus beneficiarios, lo que podría afectar la elegibilidad y el acceso a estos importantes recursos.











