La mañana de este domingo, el parque central del municipio de Nahualá, Sololá, se convirtió en un solemne escenario de luto y protesta. Familias y vecinos expusieron los féretros de 13 personas fallecidas durante un violento enfrentamiento armado ocurrido el pasado sábado 13 de diciembre en el área limítrofe con el municipio de Santa Catarina Ixtahuacán. Las víctimas, cuyas edades oscilan entre los 14 y 70 años según autoridades locales y familiares, fueron honradas en un emotivo homenaje antes de proceder al entierro de la mayoría de ellas.
Este trágico evento se inscribe en el marco de una histórica y persistente disputa territorial entre ambas comunidades indígenas, un conflicto que data del siglo XIX y ha cobrado múltiples vidas a lo largo de los años. De acuerdo con la información oficial del Gobierno de Guatemala, los hechos se registraron tras una escalada de ataques armados que obligó a la intervención del Ejército y de la Policía Nacional Civil (PNC) con el objetivo de contener la violencia.
No obstante, el presidente Bernardo Arévalo y otras autoridades han señalado que este reciente incidente no fue un enfrentamiento directo entre pobladores por la disputa de tierras, sino una clara incursión de grupos criminales armados ilegales que buscan aprovechar el conflicto para establecer control territorial y desarrollar actividades ilícitas. El alcalde de Nahualá, Manuel Tzep Carrillo, reportó la pérdida de 13 pobladores, declarando luto en el municipio.
Por su parte, la Policía Nacional Civil y el Ministerio de Gobernación confirmaron de manera preliminar cinco personas fallecidas y siete militares heridos en el enfrentamiento, indicando que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) es el encargado de establecer la causa exacta de las muertes. En respuesta a la situación, y para restablecer el orden y la seguridad, el Gobierno de Guatemala decretó el Estado de Prevención en ambos municipios, una medida con vigencia inicial de 15 días que busca limitar ciertas garantías constitucionales y controlar la presencia de estos grupos armados.
Las víctimas identificadas, según el mensaje de la comunidad de Nahualá, son:
- Andrés Guarchaj Guarchaj, de 70 años
- Tomás Guarchaj Guarchaj, de 65 años
- Domingo Guarchaj Guarchaj, de 60 años
- Tomasa Guarchaj Guarchaj, de 55 años
- Andrés Guarchaj Guarchaj, de 50 años
- Tomás Guarchaj Guarchaj, de 45 años
- Domingo Guarchaj Guarchaj, de 40 años
- Tomasa Guarchaj Guarchaj, de 35 años
- Andrés Guarchaj Guarchaj, de 30 años
- Tomás Guarchaj Guarchaj, de 25 años
- Domingo Guarchaj Guarchaj, de 20 años
- Tomasa Guarchaj Guarchaj, de 15 años
- Andrés Guarchaj Guarchaj, de 14 años
El dolor y el llamado a la paz resuenan en Sololá, mientras las autoridades mantienen su presencia en el área para asegurar la estabilidad y evitar nuevos hechos de violencia.











