El espectacular robo de joyas valoradas en más de 100 millones de dólares del Louvre en octubre pasado pudo haberse evitado si los agentes de seguridad hubieran actuado apenas 30 segundos antes, según reveló un responsable de la investigación administrativa sobre la seguridad del museo.
No l Corbin, director de la Inspección General de Asuntos Culturales, declaró ante la comisión de cultura del Senado francés que una cámara exterior había filmado claramente la llegada de los ladrones, la instalación de la plataforma elevadora y cómo dos de ellos subían al balcón para llevarse las joyas de la corona. Sin embargo, nadie estaba monitoreando esas imágenes en tiempo real, y cuando un agente activó la visualización, "ya era demasiado tarde, ya que los ladrones habían abandonado la galería".
La investigación, encargada por la ministra de Cultura Rachida Dati, también reveló que una auditoría de seguridad realizada en 2019 que identificó problemas en esa galería no fue comunicada a la nueva dirección del museo, presidida por Laurence des Cars desde 2021.
"No se debe a la acumulación de mala suerte, sino a decisiones que no se tomaron para garantizar la seguridad", afirmó el presidente de la comisión, el senador Laurent Lafon.
Tras el robo, el Louvre tuvo que cerrar temporalmente una de sus galerías debido a averías, y sus agentes de seguridad han convocado una huelga a partir del lunes para reclamar más personal y priorizar las obras más urgentes.
El espectacular robo del 19 de octubre se llevó ocho joyas del siglo XIX valoradas en más de 100 millones de dólares, lo que ha puesto en evidencia las fallas de seguridad del museo más visitado del mundo.












