La Asociación de Jueces Dominicanos para la Democracia (Judemo) ha expresado su preocupación institucional ante los efectos y alcances de la Resolución núm. 01-2025, emitida el pasado 22 de diciembre por el Comité de Comportamiento Ético del Poder Judicial. Según Judemo, esta resolución genera inquietud entre los miembros de la judicatura y plantea importantes interrogantes sobre el respeto a las garantías que amparan a los jueces.
La resolución en cuestión se originó a partir de una entrevista realizada al magistrado Rigoberto Sena, derivada de las consideraciones incluidas en su fallo sobre la medida de coerción en el caso del Seguro Nacional de Salud (SeNaSa). El Comité de Comportamiento Ético precisó que su actuación no tiene carácter sancionador y se enmarca en su función de salvaguardar la ética judicial, la legitimidad institucional y la confianza ciudadana en la administración de justicia.
Sin embargo, Judemo señala que la resolución culmina con afirmaciones que atribuyen responsabilidades éticas al juez entrevistado, acompañadas de una recomendación ética pública y una exhortación general a los integrantes del Poder Judicial. La asociación considera que este tipo de pronunciamientos, cuando se producen a partir de entrevistas internas destinadas al buen servicio judicial, no deben generar conclusiones deliberativas ni hacerse públicas, especialmente si pueden afectar la dignidad, reputación y buen nombre del juez involucrado.
Según Judemo, la difusión de recomendaciones éticas de esta naturaleza puede proyectar ante la ciudadanía la imagen de una amonestación o reprimenda, con consecuencias negativas para la percepción pública del ejercicio judicial. Asimismo, alertan que la emisión de conclusiones sobre posibles transgresiones éticas en decisiones susceptibles de recursos podría incidir indebidamente en la independencia judicial, al influir en el conocimiento de los casos por tribunales superiores y anticipar valoraciones que corresponden a los procedimientos legalmente establecidos.
Judemo reafirmó el compromiso de los jueces con los valores éticos que rigen la función jurisdiccional, pero recordó que estos deben armonizarse con el derecho fundamental a no ser juzgados sin las garantías del debido proceso, así como con la protección de la dignidad humana, la honra y la buena reputación de quienes ejercen la judicatura.
Finalmente, la entidad reiteró que la imagen del Poder Judicial no puede construirse en detrimento de la independencia judicial, pilar esencial del Estado de derecho y de un sistema de justicia democrático. En ese sentido, invitó respetuosamente al Comité de Comportamiento Ético a un diálogo reflexivo y democrático sobre el precedente creado en defensa de una justicia sólida, imparcial e independiente.
