Las Fuerzas Armadas de Honduras han reiterado su compromiso de respetar los resultados de las elecciones generales del 30 de noviembre, según un comunicado emitido este martes. La institución castrense, liderada por el general Héctor Valerio Ardón, afirmó que como "institución obediente, profesional y no deliberante, cumplirá estrictamente lo que manda la Constitución de la República y garantiza al pueblo hondureño el respeto irrestricto a la voluntad popular".
Este comunicado se da horas después de una reunión entre la Junta de Comandantes de las Fuerzas Armadas y la Comisión Permanente del Congreso Nacional, en la que se declinó la aprobación de ascensos de al menos 20 oficiales de la institución. Según el informe, el nuevo jefe de las Fuerzas Armadas habría solicitado al presidente del Congreso, Luis Redondo, que se abstuviera de aprobar dichos ascensos, lo que marca una diferencia en el liderazgo militar.
Analistas interpretan este hecho como un golpe al ministro de Defensa, Roosevelt Hernández, quien habría sido el principal promotor de los ascensos, pero que habrían discriminado y marginado a otros oficiales que se opusieron a sus "políticas dictatoriales".
La decisión de las Fuerzas Armadas de respetar los resultados electorales se produce en un momento de alta tensión política en Honduras, donde el proceso electoral del 30 de noviembre ha sido cuestionado por la oposición y la comunidad internacional. La posición de la institución castrense es vista como un importante respaldo a la legitimidad del proceso y a la voluntad popular expresada en las urnas.
El comunicado de las Fuerzas Armadas subraya su carácter "obediente, profesional y no deliberante", lo que sugiere que la institución se mantendrá al margen de las disputas políticas y se enfocará en cumplir con su mandato constitucional de defender la soberanía y la integridad territorial del país.
