El gobierno de Bolivia y los sectores de transporte se reunirán este miércoles para discutir el Decreto Supremo 5503, que encarece los combustibles en el país. La reunión, que se llevará a cabo mediante "mesas técnicas", busca encontrar una solución al conflicto que ha generado nueve días de protestas por parte de los transportistas.
El ministro de la Presidencia, José Luis Lupo, informó que la reunión se realizará en el Palacio de Gobierno y con la presencia de los medios de comunicación. "Queremos que el pueblo boliviano sepa el contenido de fondo del Decreto y las demandas de los movimientos sociales", dijo el funcionario.
Las manifestaciones contra el decreto, anunciado el 16 de diciembre, han sido respaldadas por las esposas de los afiliados a la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (Fstmb). Uno de los piquetes de las huelguistas fue instalado en las oficinas de la Fstmb en La Paz, donde las organizadoras defendieron la medida y llamaron a sumar apoyo social.
"La dirigencia de la COB está del lado de la gente, y pelea por el costo de la canasta familiar. No vamos a ser los cargadores de esta crisis. Convocamos al pueblo trabajador a sumarse", dijo una de las líderes femeninas.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la COB, Mario Argollo, lamentó que los sectores obreros tengan que llegar a estos extremos y responsabilizó al ejecutivo por la radicalización de las medidas. "La insensibilidad del Gobierno nos obliga a tomar estas decisiones. Aplaudo el valor revolucionario de mis compañeras. En tiempos de paz son amas de casa y en tiempos de guerra son armas de casa", sostuvo.
Según Argollo, las movilizaciones de la COB, retomadas el 19 de diciembre tras la emisión del Decreto Supremo 5503, son ajenas a lo sectorial y político, pues "son reivindicativas, y buscan cuidar el futuro de nuestros hijos y nietos".
La reunión de este miércoles entre el gobierno y los transportistas se produce en un contexto de tensión y radicalización de las protestas, que han generado preocupación en la población boliviana. Ambas partes esperan llegar a un acuerdo que permita desactivar el conflicto y atender las demandas de los trabajadores.
