Lucía Costa Leyba y Douglas Machado, una pareja de estafadores que se hacían pasar por escribanos y empresarios, lograron engañar a empresarios y futbolistas por más de US$ 5 millones. La Justicia dispuso medidas cautelares para evitar que sigan entorpeciendo la investigación.
La pareja, de unos 30 años, tenía un estudio jurídico-contable llamado Costa Machado SAS y otras sociedades dedicadas a inversiones inmobiliarias. Con simpatía y habilidad, Lucía Costa Leyba se hacía pasar por escribana pese a no tener título, y lograba convencer a las víctimas de que estaban haciendo grandes negocios.
Entre los estafados se encuentran el gerente deportivo de Nacional, Sebastián Eguren, y la exesposa del futbolista, así como el exsuegro de Eguren y la hermana del defensor Diego Godín. Incluso una escribana que trabajó con ellos descubrió que utilizaban su firma escaneada en escrituras de las que no había participado.
La modalidad de la estafa era ofrecer inversiones inmobiliarias supuestamente rentables, en las que los inversores debían adelantar dinero que luego no era utilizado para el negocio pactado. En algunos casos, Costa Leyba les pedía a los estafados que le devolvieran el dinero en plazos de 90 a 180 días, pero nunca cumplía.
Ante las denuncias recibidas, la Fiscalía solicitó medidas cautelares y la Justicia les retiró el pasaporte, les prohibió salir del país y les ordenó fijar domicilio por seis meses, para evitar que sigan entorpeciendo la investigación.
Además, se ordenó el levantamiento del secreto bancario, tributario y profesional de la pareja, con el fin de rastrear todos los movimientos financieros y comerciales relacionados con las sociedades que manejaban, como Costa Machado SAS, Propify SAS e Invest Group Business SAS.
La investigación continúa para lograr la imputación de los estafadores por delitos como estafa, apropiación indebida y falsificación de documento público. Según el fiscal, en algunos casos Costa Leyba admitió que se trataba de una maniobra fraudulenta y que no tenía forma de devolver el dinero a los afectados.
