China está liderando la construcción de los megabuques portacontenedores más grandes del mundo, con nueve embarcaciones de 400 metros de largo y capacidad para transportar más de 23.000 contenedores. Estas imponentes naves, edificadas cerca de Shanghái, estarán propulsadas por gas natural licuado (GNL) para reducir las emisiones contaminantes.
Pekín aspira a operar los barcos más grandes del mundo como parte de su estrategia para imponerse en el transporte marítimo global. La iniciativa combina escala, rapidez de construcción y un nuevo estándar energético para la navegación comercial.
En el colosal astillero de la isla de Changxin, a pocos kilómetros de Shanghái, más de 6.000 profesionales trabajan en la construcción de estos megacontenedores en un plazo inferior a dos años, cuando normalmente el proceso supera los 18 meses para un barco de 400 metros de largo. Para acelerar los tiempos, el montaje se realiza por bloques que luego son soldados e integrados en la estructura final.
Los megabuques portacontenedores de China funcionarán con gas natural licuado (GNL) y estarán diseñados para transportar hasta 23.000 contenedores. Estas embarcaciones alcanzarán aproximadamente 400 metros de largo, 61 metros de ancho y casi 78 metros de altura.
Al operar con GNL, los megabuques deben mantener el combustible a una temperatura muy baja, cercana a -161 C. El gas se almacena en un tanque especial y el sistema cuenta con varias capas de aislamiento y paneles de gran espesor para proteger la estructura y conservar la temperatura. La instalación del tanque es una etapa crítica que exige un proceso cuidadoso, con sellados e inspecciones permanentes para prevenir fallas.
Este proyecto se suma al anuncio de la empresa china COSCO Shipping Lines, que junto con Hudong-Zhonghua Shipbuilding construye seis megabuques portacontenedores de última generación. Estas naves buscan optimizar las rutas marítimas entre China y América Latina y abastecer el Puerto de Chancay, inaugurado oficialmente el 14 de noviembre.
La construcción de estos megabuques portacontenedores impulsados por GNL es parte de la estrategia de China para consolidar su liderazgo en el transporte marítimo mundial, combinando escala, rapidez y eficiencia energética. Estas embarcaciones transformarán la industria del comercio global y reflejan el creciente poder económico y tecnológico de la potencia asiática.












