ÚLTIMA HORA

Cobertura global las 24 hs. • lunes, 29 de diciembre de 2025 • Noticias actualizadas al minuto.

Menú

La fibra alimentaria, clave para la salud cerebral según nuevos estudios

La fibra alimentaria, clave para la salud cerebral según nuevos estudios

La fibra alimentaria no solo favorece la digestión, también cumple un papel clave en la salud cerebral. Estudios recientes indican que una ingesta adecuada de fibra puede mejorar la memoria, acelerar la velocidad de procesamiento mental y ayudar a proteger al cerebro frente a enfermedades neurológicas.

Investigaciones actuales refuerzan la relación entre alimentación y salud cerebral. Un estudio publicado en Nature Communications analizó a 36 pares de gemelos, donde un grupo recibió un suplemento diario de fibra y el otro un placebo. Los participantes que aumentaron su consumo de fibra mostraron un mejor desempeño en pruebas de memoria, tiempos de reacción y velocidad de procesamiento mental.

Estos resultados fortalecen el interés científico en el papel de la dieta como factor preventivo frente a trastornos neurológicos. Además, la relación entre fibra y cerebro cuenta con respaldo tanto en estudios realizados en humanos como en modelos animales, lo que refuerza la consistencia de los hallazgos.

La fibra alimentaria forma parte de los carbohidratos, pero a diferencia de otros nutrientes, no se digiere ni se absorbe. Su función ocurre durante su paso por el sistema digestivo, donde genera distintos beneficios según su tipo. Existen dos formas principales de fibra: soluble e insoluble, y la mayoría de los alimentos de origen vegetal las contienen en proporciones variables.

Según la Mayo Clinic, las necesidades diarias de fibra dependen de la edad y el sexo. En adultos, la recomendación es clara: las mujeres menores de 50 años deben consumir alrededor de 25 gramos diarios, mientras que los hombres requieren cerca de 38 gramos.

La recomendación principal es obtener la fibra a partir de alimentos naturales y variados. Entre las fuentes más accesibles se encuentran los granos enteros, frutas, verduras, legumbres, semillas y frutos secos. Elegir cereales integrales en el desayuno, preferir pan de trigo integral y sustituir productos refinados por versiones integrales facilita alcanzar estas cantidades sin cambios drásticos en la dieta.

Más allá de la salud cerebral y digestiva, una alimentación rica en fibra se asocia con múltiples beneficios, como el control del peso corporal, la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas y una mejor regulación del colesterol y la glucosa en sangre. También se ha observado una menor incidencia de ciertos tipos de cáncer y trastornos como la diverticulitis.

Pequeñas decisiones cotidianas en la mesa pueden convertirse, con el tiempo, en una herramienta efectiva para proteger la mente y el cuerpo de forma integral.

¿Te gusta estar informado?

Recibe las noticias más importantes de Latinoamérica directamente en Telegram. Sin Spam, solo realidad.

Unirme Gratis