Brigitte Bardot, la legendaria actriz francesa que revolucionó el cine en los años 50 con su belleza explosiva y su vida privada tumultuosa, falleció a los 91 años en su residencia de Saint-Tropez, en el sur de Francia.
Bardot, considerada la "bomba rubia" francesa y comparada con Marilyn Monroe, abandonó el mundo del cine hace más de cincuenta años, dejando tras de sí una carrera de unas cincuenta películas y dos escenas icónicas: un mambo febril en un restaurante de Saint-Tropez en "Y Dios creó a la mujer" (1956) y un monólogo desnuda enumerando las partes de su cuerpo en "El desprecio" (1963).
Tras su retiro, Bardot se dedicó a la causa que le apasionaba: los derechos de los animales, creando la Fundación Brigitte Bardot en 1986. En sus últimos años, también fue conocida por sus polémicas posturas políticas y declaraciones sobre temas como la inmigración y el feminismo.
Nacida en París en 1934, Bardot fue descubierta a los 15 años y se convirtió rápidamente en la chica de portada más famosa de la capital francesa. Su estilo desenfadado y su cabello suelto la convirtieron en un ícono de la "jeune fille" (chica joven) de la época.
Bajo la dirección de su entonces esposo, Roger Vadim, Bardot alcanzó la fama mundial con películas como "Y Dios creó a la mujer", que la catapultó a la estrellato. Sin embargo, siempre se sintió frustrada por no poder ser tomada en serio como actriz dramática.
Tras su retiro, Bardot vivió en el sur de Francia, rodeada de sus animales y en busca de "paz y naturaleza", tal como ella misma declaró en una de sus últimas entrevistas. Su legado como estrella y defensora de los derechos animales la convierte en una de las figuras más icónicas del cine y la cultura francesa del siglo XX.











