La construcción en Argentina registró un crecimiento del 0,46% en los primeros seis meses de 2025, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Este resultado se logró gracias al impulso de la inversión privada, a pesar de las dificultades que enfrentan los proyectos estatales.
El informe del INE destaca que, en un año adverso, el sector de la construcción logró mantener un desempeño positivo. Esto se debió principalmente a la dinámica de la inversión privada, que contrarrestó los problemas que afectan a las obras públicas.
Entre los desafíos que enfrentan los proyectos estatales se encuentran la reducción en el lanzamiento de nuevas obras, las deudas pendientes con las empresas constructoras y la variación de los costos causados por diversos factores macroeconómicos.
"La construcción privada ha sido el principal motor de crecimiento del sector en este período. Las empresas han mantenido sus planes de inversión y han logrado sortear las dificultades del contexto actual", explicó un analista del INE.
Según los datos, la construcción privada registró un aumento del 2,3% en los primeros seis meses del año, mientras que la obra pública cayó un 3,1% en el mismo período.
"Es importante destacar que, a pesar de las adversidades, la construcción ha logrado mantenerse en terreno positivo. Esto demuestra la resiliencia del sector y su capacidad para adaptarse a las circunstancias cambiantes", agregó el analista.
Los expertos coinciden en que el desempeño de la construcción en 2025 será clave para el crecimiento económico del país. El sector genera un importante efecto multiplicador en la actividad y el empleo, por lo que su evolución tendrá un impacto significativo en el desempeño general de la economía.
