La intensa tormenta invernal que azotó gran parte de Estados Unidos este fin de semana provocó el caos en el transporte aéreo, con la cancelación de más de 7.000 vuelos y la suspensión de otros 1.300, según datos del portal especializado FlightAware.
La acumulación de nieve llegó a alcanzar los 28 centímetros en algunas zonas metropolitanas de Nueva York y Nueva Jersey, superando las previsiones iniciales. Esto llevó al Servicio Meteorológico Nacional a advertir sobre "numerosos peligros invernales" a partir del domingo por la noche, incluyendo condiciones de ventisca y acumulaciones de nieve de más de 30 centímetros en el Alto Medio Oeste y los Grandes Lagos.
La tormenta se produjo en plena temporada navideña, considerada una de las más concurridas, con más de 44 millones de pasajeros previstos, lo que agravó aún más el impacto de las cancelaciones y suspensiones de vuelos en los aeropuertos.
"Se espera que este sistema venga acompañado de numerosos peligros invernales a partir de mañana por la noche, entre ellos condiciones de ventisca y acumulaciones de nieve de más de 30 centímetros en zonas del Alto Medio Oeste y de los Grandes Lagos", advirtió el Servicio Meteorológico.
La Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) recordó que esta temporada navideña se prevé como una de las más concurridas, con más de 44 millones de pasajeros, lo que agrava el impacto de las cancelaciones en los aeropuertos.
El panorama actual refleja una combinación de condiciones meteorológicas extremas y alta demanda de viajes, que mantiene en alerta a las autoridades y a millones de usuarios en plena época festiva.



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