El Santos se encuentra en la recta final de 2025 inmerso en negociaciones cruciales para planificar la próxima temporada, y la principal de ellas involucra el futuro de Neymar. El club corre contra reloj para formalizar la renovación de contrato con su estrella, mientras monitorea de cerca su recuperación física tras una nueva cirugía en la rodilla izquierda.
La expectativa en la Vila Belmiro es que el nuevo contrato sea firmado antes de que comience enero. El delantero se sometió a una artroscopia el lunes pasado en Belo Horizonte, bajo la supervisión del médico Rodrigo Lasmar, responsable también del departamento médico de la selección brasileña. Desde entonces, Neymar ha estado realizando sesiones de fisioterapia en casa y se moviliza con la ayuda de muletas. Pasó la Navidad en Mangaratiba (RJ) junto a su familia, y ha mantenido contacto con los profesionales del Santos para ajustar los detalles de su cronograma de recuperación.
Más allá de la cuestión deportiva, el Peixe también trabaja entre bastidores para resolver el contrato de imagen con NR Sports, la empresa liderada por Neymar padre y encargada de gestionar la carrera del atleta. El acuerdo contempla el pago de 85 millones de reales hasta finales de 2026, monto correspondiente a compromisos comerciales firmados desde el regreso del crack a la Vila Belmiro.
A pesar de la complejidad financiera de la negociación, las partes demuestran optimismo. El Santos sabe que Neymar mantiene el deseo de disputar la Copa del Mundo de 2026 y ve al club como un camino ideal para prepararse y convencer a Carlo Ancelotti, técnico de la selección brasileña, de incluirlo en la lista final.
Los próximos meses serán cruciales: la próxima Fecha FIFA será en marzo, con amistosos contra Francia y Croacia en Estados Unidos. No obstante, Neymar solo debe volver a las canchas a principios de febrero, perdiéndose el inicio del Paulist o y las primeras jornadas del Campeonato Brasileño.











