Cientos de fieles acudieron este domingo a la Catedral Metropolitana de Panamá para participar en la ceremonia de cierre del Año Jubilar, un evento religioso de gran importancia para la comunidad católica del país.
El Año Jubilar es un período de gracia y perdón que la Iglesia Católica celebra cada cierto tiempo. En esta ocasión, Panamá fue sede del Año Jubilar Mariano, dedicado a la Virgen María, que se extendió desde diciembre de 2021 hasta diciembre de 2022.
Durante este año, los fieles han peregrinado a la Catedral Metropolitana, considerada uno de los principales santuarios marianos de Panamá, para ganar indulgencias y fortalecer su fe. La ceremonia de cierre del Año Jubilar marca el fin de este ciclo especial de celebraciones y oraciones.
"Es un momento de mucha emoción y espiritualidad para nosotros. Hemos venido a agradecer a la Virgen María por este año de gracia y a renovar nuestro compromiso de fe", comentó Juana Rodríguez, una feligresa que asistió a la ceremonia.
La misa de clausura estuvo presidida por el arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, quien en su homilía resaltó la importancia de mantener viva la devoción mariana en el país. "La Virgen María es nuestra madre y guía, y debemos seguir acercándonos a ella con confianza y amor", expresó el prelado.
Además de la celebración litúrgica, los asistentes tuvieron la oportunidad de venerar la imagen de la Virgen de la Antigua, patrona de Panamá, y participar en procesiones y otros actos de piedad popular.
"Es una experiencia muy enriquecedora, sentir la unión de toda la comunidad católica en torno a la Madre de Dios. Nos fortalece espiritualmente y nos recuerda la importancia de mantener viva nuestra fe", afirmó Margarita Sánchez, otra de las fieles presentes.
El cierre del Año Jubilar Mariano en Panamá marca el final de un ciclo de celebraciones y peregrinaciones que han congregado a miles de católicos en torno a la devoción a la Virgen María. Un momento de gran significado espiritual para la Iglesia y los fieles del país.
