Las tradicionales uvas de la suerte para despedir el 2025 llegan a los consumidores con precios que los productores consideran estables, pero que en algunos casos han subido hasta un 40% según organizaciones de consumidores. Sin embargo, la directora de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Uva de Mesa del Vinalopó (Alicante), Beatriz Rocamora, descarta una subida generalizada de precios, atribuyendo el incremento en algunos puntos de venta a motivos comerciales o circunstanciales, y no a los productores.
La campaña de producción de uva temprana de este 2025 ha sido "complicada", con más oferta y una demanda más restringida, según Rocamora. No obstante, la uva nacional, como la tradicional Aledo, no habría sufrido aumentos del 40% como sí se ha reportado para la uva blanca sin pepita importada, cuyo mayor costo de llegada a los lineales explicaría su precio más elevado.
Pese a ello, Nochevieja sigue siendo una fecha que "dispara" el consumo nacional de uva, con un incremento del 1% en noviembre respecto al año anterior que se duplica en las últimas dos semanas del año. Además, se observa una creciente variedad de formatos, como las 12 uvas envasadas en bolsas o copas, y una mayor demanda de la uva sin pepitas, aunque la Aledo sigue siendo la favorita.
La tradición de tomar las doce uvas para despedir el año tiene sus orígenes en la comarca alicantina del Valle del Vinalopó, donde los agricultores aprovecharon una buena cosecha en 1909 para sacarlas al mercado bajo el nombre de "uvas de la suerte". Aunque hay algunas teorías sobre su origen, lo cierto es que esta costumbre se ha convertido en un ritual inseparable de la Nochevieja en España.
