El Festival Internacional del Centro Histórico (FICH) de la bellísima ciudad de Campeche ha llegado a su fin con un saldo estupendo de conciertos, exposiciones, eventos literarios y funciones de artes escénicas, convocando a públicos diversos y nutridos.
El Instituto de Cultura y Artes del gobierno campechano, a través de su titular Mónica Sosa Rodríguez, arrancó esta edición del FICH 2025 el 1 de diciembre con el encendido del Árbol de Navidad, acompañado de música de las bandas comunitarias que promueve, el Ballet Folclórico Luisa María Sosa Illescas, la Marimba El Pregonero y la Banda de Música del Gobierno del Estado.
La conclusión del FICH tuvo un cierre apoteósico con un concierto de Lila Downs el sábado 20 en el atrio de la Catedral y el lunes 22 con la Orquesta Primavera de Oaxaca. En cuanto a la curaduría de teatro, la obra "El buen canario" de Zach Helm corrió bajo la dirección del director de larga trayectoria Alfonso Esquivel, quien ha formado a muchas generaciones de teatristas campechanos.
Otras obras participantes fueron "La alacena" de la Compañía Casa B bajo la dirección de Tanya Huntington, "Orinoco" de Emilio Carballido dirigido por la talentosa Sandra Muñoz de Tampico con su Dosce la Compañía, el poderoso monólogo "Dulces y amargos sueños" de Petrona de la Cruz desde Chiapas, "El circo de Luicio Espíndola" de Marionetas de la Esquina de Ciudad de México para las infancias, y "¿A dónde va señor Tlacuache?" de Mulato Teatro desde Morelos, entre otras.
Sobre el monólogo "Máquina Mundo: Barbie" de la agrupación de Mérida encabezada por Mariano Olivera, el autor señala que si bien es un buen ejercicio del que el director sabe sacar partido gracias a una poderosa actriz, la dramaturgia prometía más de lo que finalmente desarrolló.
En general, el Festival Internacional del Centro Histórico de Campeche 2025 fue un excelente ejemplo de buena gestión, con una estupenda coordinación, atención a los artistas y convocatoria de diversos públicos. Y la increíble ciudad amurallada y sus sorprendentes espacios arquitectónicos fueron el marco idóneo para este evento cultural de gran éxito.
