La Navidad se tiñó de tragedia en Villa Sarmiento, una localidad cercana a La Plata, Argentina. Angelina, una niña de 5 años, fue alcanzada por una bala perdida mientras celebraba junto a su familia en la casa de sus abuelos, minutos después de la medianoche.
El impacto del proyectil ocurrió alrededor de las 12:05 am, cuando la pequeña se encontraba en la vereda mirando los fuegos artificiales. Según el desgarrador testimonio de su tío, Angelina "cayó desplomada" sin que nadie lograra escuchar el origen del disparo.
De inmediato, la familia trasladó a la niña a un centro médico de Ramos Mejía, donde permanece internada en estado delicado. Si bien el tío aseguró que Angelina "está mejor, estable", aclaró que el proyectil aún se encuentra alojado en su cuerpo y que el cuadro sigue siendo grave.
"Es una criatura. Solo pedimos que se recupere y pueda vivir tranquila después de esto", imploró el familiar, visiblemente conmovido por la violenta situación que interrumpió los festejos navideños.
Lamentablemente, este no es un hecho aislado. En la misma noche, en la ciudad de La Plata, un hombre murió tras recibir un disparo por parte de un vecino que se encontraba manipulando fuegos artificiales. Estos trágicos episodios ponen en evidencia la peligrosidad del uso indiscriminado de artefactos pirotécnicos y la necesidad urgente de tomar medidas para evitar que se repitan este tipo de hechos.
Las autoridades informaron que se encuentra detenido un sospechoso por el ataque a Angelina, aunque aún se desconocen los detalles del móvil y las circunstancias exactas del incidente. Mientras tanto, la familia de la niña permanece a la espera de que su estado de salud evolucione favorablemente y pueda recuperarse por completo de esta violenta experiencia.












