En plenas fiestas de fin de año, Pep Guardiola ha impuesto una polémica medida en el Manchester City: el control de peso de todos sus jugadores. El técnico aseguró que pesará a todo el plantel a su regreso de las vacaciones navideñas, con el objetivo de mantener la disciplina y el profesionalismo.
Esta decisión no tardó en generar revuelo, especialmente después de que el delantero estrella Erling Haaland publicara una imagen en redes sociales burlándose de la situación. El noruego se mostró en la báscula, acompañado del mensaje "Todo bien", en clara ironía a las exigencias de Guardiola.
Según el entrenador, la medida responde a la necesidad de mantener a los jugadores en forma de cara a los próximos compromisos, incluido el duelo del 27 de diciembre contra el Nottingham Forest. Guardiola advirtió que aquellos futbolistas que regresen con sobrepeso se quedarán en Mánchester y no viajarán con el equipo.
"Ayer (viernes) se pesaron. Se pesó a todos los jugadores. Y el 25 estaré ahí controlando cuántos kilos suben, si vuelven con más peso", declaró el técnico catalán, quien busca mantener la disciplina en un Manchester City que no ha tenido un inicio de temporada del todo convincente.
La medida ha generado críticas de algunos sectores, que la consideran una injerencia en la libertad de los jugadores durante sus vacaciones. Sin embargo, Guardiola insiste en que es necesario mantener el profesionalismo, sobre todo en un equipo que aspira a luchar por todos los títulos.
Erling Haaland, máxima figura del conjunto ciudadano, ya demostró que pasó la prueba del pesaje sin problemas. El delantero noruego acumula 25 goles y 4 asistencias en 23 partidos oficiales esta temporada, y será clave para los planes de Guardiola en la segunda parte de la campaña.












