Los New York Knicks firmaron una remontada épica este 25 de diciembre en el Madison Square Garden, venciendo 126-124 a los Cleveland Cavaliers en un partido que quedará grabado en la retina de los fanáticos.
Tras ir perdiendo por 17 puntos en el tercer cuarto, los Knicks protagonizaron una increíble reacción liderada por Jalen Brunson y Karl-Anthony Towns, quienes combinaron para anotar 52 de los 126 puntos del equipo.
Brunson, el corazón de la franquicia, explotó en la segunda mitad para liderar el ataque de los neoyorquinos. Por su parte, el dominicano Towns fue la fuerza bruta y la eficiencia que permitió a los Knicks mantenerse a flote cuando parecían sentenciados.
La remontada comenzó con un triple del novato Tyler Kolek que puso al equipo a tiro de piedra. Luego, una defensa asfixiante provocó una pérdida de Cleveland que Mikal Bridges castigó en transición, encendiendo la euforia en el Garden.
En los minutos finales, Brunson clavó un triple que supo a gloria, mientras que Towns se hizo gigante en la pintura, peleando cada rebote y sumando puntos fundamentales para sostener la ventaja. Donovan Mitchell intentó la heroica con un triple inverosímil, pero un tiro libre en los segundos finales terminó de poner el candado al marcador.
Con esta victoria, los Knicks mejoran su récord a 21-9, afianzándose en el segundo puesto de la Conferencia Este. Es mucho más que un número en la tabla; es un mensaje directo para el resto de la liga: este equipo sabe sufrir y, sobre todo, sabe cómo ganar cuando las luces brillan con más fuerza.
La Navidad en Nueva York tuvo un dueño claro, y ese fue el espíritu de lucha de los Knicks, que demostraron una vez más por qué son uno de los equipos más emocionantes de la NBA esta temporada.
