La diputada independiente (RN) ha denunciado que el Gobierno de Gabriel Boric está llevando a cabo un "protocolo de amarre" en sus últimos días, buscando dificultar la transición al próximo gobierno. Según la legisladora, el oficialismo estaría intentando institucionalizar mediante la ley de reajuste del sector público una práctica que "roza derechamente la falta de dignidad", donde funcionarios públicos se niegan a dejar sus cargos a pesar de saber que su ciclo ha terminado.
La diputada explica que esta maniobra busca poner "piedras en la pista de aterrizaje" del gobierno de José Antonio Kast, al forzar la permanencia de funcionarios afines al actual mandatario. Esto, advierte, iría en contra de los principios de eficiencia y modernización que el Estado necesita.
"Convertir el empleo estatal en un espacio blindado, ajeno a la evaluación, a la gestión y a los resultados, es exactamente el camino contrario al que necesita el país", señala la legisladora. Agrega que voces técnicas como los economistas David Bravo y Vittorio Corbo han advertido públicamente sobre las consecuencias de avanzar hacia la "inamovilidad" de los funcionarios públicos.
La diputada sostiene que el Gobierno saliente tuvo la oportunidad de facilitar una transición ordenada, pero en su lugar optó por "estirar el poder hasta el último centímetro, sin pudor y sin comprensión del daño que ello provoca al Estado". Califica esta maniobra como una "retirada indigna" del poder.












