El presidente estadounidense, Donald Trump, intensificó la presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela al anunciar un bloqueo naval dirigido a los "buques petroleros sancionados" que navegan hacia y desde las costas venezolanas. Trump aseguró que lo más "inteligente" que puede hacer Maduro es dimitir, mientras Washington también despliega naves de guerra en el Caribe en una ofensiva contra el narcotráfico.
La tensión entre Estados Unidos y Venezuela se ha agudizado en los últimos meses. Trump exige la devolución de activos estadounidenses supuestamente robados y acusa a Caracas de usar el dinero del petróleo para financiar "terrorismo relacionado con drogas, la trata de personas, asesinato y secuestros". Washington también presiona con un fuerte despliegue naval contra embarcaciones que presuntamente transportaban drogas en el Caribe y el Pacífico oriental.
Por su parte, Maduro denuncia una campaña para derrocarlo y adueñarse de las riquezas del país. El mandatario venezolano aseguró que a Trump "le iría mejor" si "atendiera los temas" de Estados Unidos y no se enfocara tanto en Venezuela. Además, Maduro agradeció el respaldo de Rusia y China ante el bloqueo naval estadounidense.
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, aseguró que Maduro "tiene que salir" del poder, mientras que Washington acusa al presidente venezolano de liderar el supuesto Cartel de los Soles, calificado como grupo "narcoterrorista", y ofreció una recompensa de 50 millones de dólares por información que lleve a su captura.
En medio de esta escalada de tensiones, la gigante petrolera estadounidense Chevron envió un buque con crudo venezolano a Estados Unidos, en lo que se interpreta como un gesto de distensión entre ambos países.
