El presidente estadounidense Donald Trump intensificó su presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela al anunciar un bloqueo de "buques petroleros sancionados" que navegan hacia y desde costas venezolanas. Esta nueva medida se suma a la ofensiva militar que Washington ha desplegado en el Caribe desde septiembre, la cual ya ha dejado más de 100 muertos.
Trump advirtió que lo "más inteligente" que puede hacer Maduro es dimitir, en medio de una escalada verbal entre ambos mandatarios. El presidente venezolano, por su parte, cuestionó que Trump dedique gran parte de sus discursos a Venezuela en lugar de atender los problemas de su propio país.
La tensión entre Estados Unidos y Venezuela se ha agudizado en los últimos meses. Washington ya ha incautado dos tanqueros cargados con petróleo venezolano, que Caracas califica como "actos de piratería y robo descarado". Trump exige la devolución de activos estadounidenses supuestamente robados y acusa al gobierno de Maduro de financiar "terrorismo relacionado con drogas, trata de personas, asesinato y secuestros" con el dinero del crudo.
Además, la Casa Blanca ha intensificado su despliegue naval en el Caribe y el Pacífico oriental, con el objetivo de interceptar embarcaciones que presuntamente transportan drogas. Estas acciones han dejado cerca de 30 naves destruidas y al menos 104 personas muertas.
La escalada de tensiones entre Trump y Maduro se produce en un momento de profunda crisis económica y social en Venezuela, agravada por las sanciones internacionales y la pandemia de COVID-19. Analistas advierten que el conflicto podría derivar en una intervención militar estadounidense, con consecuencias imprevisibles para la región.
