Al menos 18 militares fueron secuestrados este domingo (21.12.2025) en una zona rural del departamento del Chocó, en el oeste de Colombia, por una multitud que al parecer buscaba impedir una operación contra la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El hecho ocurrió en la localidad de Carmen de Atrato donde "una unidad militar fue rodeada e interceptada por aproximadamente 200 personas, que retuvieron y trasladaron de manera arbitraria a los soldados hacia un resguardo indígena", señaló la XV Brigada del Ejército en un comunicado.
Este tipo de secuestros o retenciones de militares por parte de civiles se ha vuelto frecuente en el conflicto colombiano, según las autoridades, debido a que los habitantes de zonas remotas son "instrumentalizados" por guerrilleros o narcotraficantes para impedir las operaciones en su contra.
Los casos más recientes ocurrieron en agosto pasado en el departamento del Guaviare (centro-sur), donde 34 militares fueron secuestrados por campesinos, y en septiembre otros 45 corrieron la misma suerte en el Cauca (suroeste). En ambos casos, todos fueron liberados días después con la mediación de misiones humanitarias.
El Ejército Nacional rechazó "de manera categórica y enfática cualquier acción que vulnere la libertad personal, la integridad y la seguridad de los miembros de la fuerza pública, así como toda conducta que obstaculice, interfiera o impida el desarrollo de las operaciones militares legítimas del Estado".
Tras el caso de hoy en el Chocó, el Ejército hizo "un llamado urgente, respetuoso y perentorio a las autoridades competentes, organismos de derechos humanos y líderes comunitarios para que se garantice plenamente la integridad física de los soldados retenidos y se permita su pronta y segura liberación".
El secuestro de militares por parte de civiles se ha convertido en un fenómeno recurrente en el conflicto armado colombiano, donde los habitantes de zonas remotas son a menudo utilizados por grupos armados ilegales para impedir las operaciones de las fuerzas de seguridad.
Según las autoridades, esta práctica se debe a que los guerrilleros y narcotraficantes "instrumentalizan" a la población local para obstaculizar las acciones del Estado en su contra. Los casos más recientes ocurrieron en agosto y septiembre de 2025 en otras regiones del país, donde decenas de soldados fueron secuestrados y luego liberados tras la mediación de misiones humanitarias.
El Ejército colombiano ha condenado enérgicamente estos hechos, calificándolos como una grave violación a la libertad y seguridad de sus miembros. Ahora hace un llamado urgente a las autoridades y líderes comunitarios para garantizar la integridad de los 18 militares retenidos en Chocó y facilitar su pronta liberación.
