El 31 de diciembre de 1999, Panamá asumió la administración, operación y mantenimiento del Canal Interoceánico, marcando un hito histórico en la soberanía del país. Sin embargo, a 25 años de este logro, Panamá enfrenta nuevas amenazas a su independencia.
El traspaso del Canal a manos panameñas fue el resultado de décadas de lucha y sacrificio por parte del pueblo panameño. Hechos como la Operación Soberanía de 1958 y la gesta del 9 de enero de 1964, en la que estudiantes marcharon hasta la antigua Zona del Canal para izar la bandera nacional, son emblemas de la determinación y patriotismo de los panameños en su reclamo de soberanía.
Estos sucesos marcaron un punto de inflexión en las negociaciones entre Panamá y Estados Unidos, que finalmente llevaron a la firma del Tratado Torrijos-Carter en 1977, que estableció la devolución del Canal a Panamá en un plazo de 20 años.
Sin embargo, a finales de 2024, el próximo presidente de Estados Unidos ha realizado declaraciones "temerarias" que amenazan con recuperar el control del Canal, bajo el argumento de asegurar su neutralidad y presionar en los precios de los peajes. Aunque poco probable que se concrete, estas amenazas lesionan la soberanía panameña y desconocen la historia de la lucha por la independencia de la vía interoceánica.
Paralelamente, el Municipio de Panamá emitió un decreto que suspende actividades bailables y musicales el 9 de enero, día en que se conmemora la gesta de los mártires del 64. Esto es visto como un mensaje lamentable que prioriza la dinámica comercial por sobre la reflexión cívica e histórica.
Estas situaciones reflejan la pérdida de valor que las nuevas generaciones le dan a estos hechos históricos, en parte por la falta de formación en la materia y la ineficiencia en la distribución de los recursos generados por el Canal, que ha aportado más de $25,000 millones en 25 años.
Ante este escenario, los panameños exigen una verdadera transformación educativa que fortalezca la enseñanza de la historia nacional, y la construcción de un modelo económico que promueva el bienestar de toda la población. Solo así podrán honrar la memoria de quienes lucharon por la soberanía del Canal y asegurar un futuro de independencia para Panamá.












