La victoria del candidato de extrema derecha José Antonio Kast en la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Chile ha generado gran preocupación entre la comunidad venezolana residente en el país. Según un censo reciente, el 42% de los migrantes extranjeros en Chile son de origen venezolano, convirtiéndose en el grupo más numeroso.
"La victoria de Kast nos pone a todos en una situación de alerta", señaló Juana Rodríguez, una venezolana que lleva 5 años viviendo en Santiago. "Sus propuestas de mano dura contra la inmigración y el endurecimiento de las políticas migratorias nos tienen muy preocupados".
Kast, un admirador confeso del dictador Augusto Pinochet, ha prometido endurecer las políticas de control migratorio, facilitar la deportación de extranjeros y limitar el acceso a servicios públicos para los migrantes. Esto ha generado temor entre la comunidad venezolana, muchos de los cuales huyeron de la crisis humanitaria y la represión política en su país.
"Nos sentimos vulnerables, con miedo a que se nos cierre la puerta y nos deporten", comentó Carlos Suárez, un venezolano que llegó a Chile hace 3 años. "Hemos visto cómo en otros países la retórica anti-inmigrante se ha traducido en abusos y violencia contra nosotros".
Según datos del Departamento de Extranjería y Migración de Chile, la población venezolana en el país creció un 1.200% entre 2014 y 2020, convirtiéndose en la nacionalidad extranjera más numerosa. Muchos de ellos huyeron de la crisis política, económica y social que azota a Venezuela desde hace años.
"Venimos buscando una oportunidad, huyendo de la desesperación. No queremos problemas, solo trabajar y sacar adelante a nuestras familias", manifestó Luisa Fernández, otra venezolana residente en Santiago. "Esperamos que el próximo gobierno entienda nuestra situación y no nos trate como delincuentes".
Las elecciones presidenciales en Chile se definirán en una segunda vuelta el próximo 19 de diciembre. Kast se enfrentará al candidato de izquierda Gabriel Boric, quien ha prometido una política migratoria más abierta y respetuosa de los derechos humanos. La comunidad venezolana en Chile confía en que esta opción prevalezca para evitar un endurecimiento de las políticas que tanto les preocupa.
