El fútbol hondureño se encuentra sumido en un verdadero caos logístico debido a la disputa de la final del Torneo Apertura. El empate 1-1 entre Olimpia y Motagua no solo dejó con el "grito de clasificación ahogado" al León, sino que desató un desorden total en el calendario.
La situación se complica aún más con la decisión del club Real España de no presentarse a disputar la final, programada originalmente para este fin de semana. Según informaron desde el club, la negativa se debe a que "no se han cumplido con los requisitos mínimos" para la organización del partido definitorio.
Ante esta situación, la Federación Hondureña de Fútbol (FENAFUTH) se vio obligada a reprogramar la final para una fecha aún no definida, pero que podría llevarse a cabo recién en 2026. Sí, así como lo lees: la definición del Torneo Apertura podría postergarse hasta dentro de 4 años.
"Es una locura, no entendemos cómo se llegó a esta situación. Nosotros queríamos jugar la final este fin de semana, pero parece que los organizadores no estaban preparados", señaló un dirigente de Olimpia, uno de los finalistas.
La crisis en el fútbol hondureño se profundiza aún más con este nuevo capítulo. Los hinchas, que esperaban disfrutar de una definición apasionante, deberán resignarse y esperar varios años para ver coronado al campeón del Torneo Apertura.
Expertos en el ámbito futbolístico local aseguran que este tipo de situaciones son comunes en Honduras, donde la desorganización y la falta de planificación parecen ser moneda corriente. "Lamentablemente, esto no nos sorprende. El fútbol hondureño es un verdadero manicomio", sentenció un periodista deportivo.
Mientras tanto, los clubes y los fanáticos deberán tener paciencia y aguardar por una resolución de la FENAFUTH, que tendrá la ardua tarea de encontrar una nueva fecha para la tan ansiada final del Torneo Apertura. Una final que, de concretarse, se jugará dentro de varios años.









