Después de más de 17 horas de intensas sesiones, la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) de Bolivia no logró alcanzar el consenso necesario para elegir a los seis nuevos vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE). Tras un proceso de selección que incluyó la evaluación de 259 postulantes, la ALP se encuentra en un impasse que podría poner en riesgo el cronograma electoral del país.
El informe final del proceso de selección, elaborado por la Comisión Mixta de Constitución, Legislación y Sistema Electoral, fue remitido a la Presidencia de la ALP. Sin embargo, los debates y negociaciones entre los diferentes bloques políticos no lograron desembocar en un acuerdo que permitiera la designación de las nuevas autoridades electorales.
Según los detalles revelados, la sesión de la ALP se extendió hasta las 4:49 de la madrugada de este sábado, cuando el presidente de la Cámara, Edmán Lara, decretó un nuevo cuarto intermedio hasta las 10:00 horas, con la esperanza de destrabar las negociaciones y concluir el proceso de selección.
Durante la sesión, la ALP entró en al menos una decena de cuartos intermedios, lo que evidencia la complejidad de las negociaciones y la dificultad para alcanzar un consenso. Cabe destacar que el mandato de los actuales vocales del TSE vence el próximo 19 de diciembre, por lo que la ALP se encuentra contra reloj para resolver esta situación.
La falta de acuerdo entre los diferentes bloques políticos representa un desafío importante para la democracia boliviana, ya que la conformación del Tribunal Supremo Electoral es crucial para garantizar la transparencia y legitimidad de los futuros procesos electorales. Expertos en el tema advierten que este impasse podría tener repercusiones en el calendario electoral y generar incertidumbre en la población.
Ante este escenario, la ALP deberá redoblar esfuerzos en las próximas horas para lograr el consenso necesario y designar a los nuevos vocales del TSE, evitando así cualquier posible afectación al sistema electoral boliviano.
