Las autoridades colombianas han intensificado la búsqueda de alias "Max Max", un hombre de confianza de Iván Mordisco y señalado como el explosivista principal de la estructura disidente "Jaime Martínez", una de las más violentas en el suroccidente del país. El Gobierno Nacional ofrece una recompensa de hasta 500 millones de pesos por información que conduzca a su ubicación y captura.
Según el Ministerio de Defensa, "Max Max" estaría vinculado a delitos de terrorismo, rebelión y diversas acciones criminales, entre ellas atentados con explosivos, hostigamientos armados y operaciones de control territorial en zonas estratégicas del Cauca y el Valle del Cauca. Las investigaciones lo señalan como uno de los responsables del secuestro del menor Lyan Hortúa en Jamundí (Valle del Cauca) y del atentado contra la base de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) en Cali.
Más recientemente, "Max Max" habría tenido un papel clave en la toma armada disidente en el municipio de Buenos Aires, Cauca, donde se registraron ataques coordinados con explosivos y armas de largo alcance, dejando víctimas entre uniformados y civiles, además de daños a la infraestructura pública.
Según información de inteligencia, este hombre habría escalado dentro de la estructura "Jaime Martínez" hasta convertirse en cabecilla de escuadra y coordinador de acciones terroristas, con influencia en varios corredores rurales utilizados para el tránsito de armas, explosivos y economías ilegales.
La intensificación de la búsqueda de "Max Max" se enmarca en los esfuerzos del Gobierno colombiano por desarticular las estructuras disidentes de las FARC, que continúan generando violencia y amenazas a la seguridad en varias regiones del país. La recompensa ofrecida refleja la importancia que se le atribuye a la captura de este presunto cabecilla, considerado uno de los principales responsables de los recientes ataques en el Cauca.










