El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este jueves fuertes restricciones a la atención médica relacionada con los procesos de cambio de género en menores de 18 años. Estas medidas buscarían cortar fondos federales a las instituciones de salud que ofrezcan estos tratamientos.
El secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., informó que se tomarán seis acciones decisivas "guiadas por la ciencia de más alto nivel" para "proteger a los niños de la mutilación química y quirúrgica". Entre ellas, se firmó una declaración que "rechaza los procedimientos de reasignación de sexo" por no ser un "tratamiento seguro ni efectivo para niños con disforia de género".
Además, los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid han propuesto normas para prohibir el uso de "dólares federales" para financiar estos tratamientos. De entrar en vigor, estas reglas bloquearían pagos a proveedores de salud y hospitales que brindan atención médica de género a niños.
La Administración también emitió cartas de advertencia a doce fabricantes de fajas para el pecho utilizadas en la recuperación de mastectomías relacionadas con el cáncer, para evitar su "comercialización ilegal" a menores con disforia de género.
Estas nuevas normativas han sido criticadas por especialistas en salud y activistas por los derechos LGTBIQ, quienes aseguran que pondrán en serias dificultades las posibilidades de acceso a atención pediátrica en el país a menores transgénero. Actualmente, 27 estados ya prohíben la atención pediátrica de afirmación de género.
La orden ejecutiva firmada por Trump en enero pasado también restringe el financiamiento de procedimientos de cambio de sexo, lo que se enmarca en el recrudecimiento de la retórica y las políticas contra las personas transgénero impulsadas por el mandatario republicano a su vuelta al poder.











