En un mensaje a la nación, el presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, anunció una serie de medidas económicas y sociales que buscan proteger a las familias más vulnerables del país. Entre los principales cambios destacan la creación de un nuevo programa de transferencias monetarias, el aumento de la Renta Dignidad y del Bono Juancito Pinto, así como un incremento del 20% en el salario mínimo nacional.
El "Programa Extraordinario de Protección y de Equidad" entregará 200 bolivianos cada cuatro meses (600 bolivianos al año) a aquellos padres de familia que no cuenten con aportes contributivos. Según Paz, esta no es una medida asistencialista, sino una forma de "ayudar a las familias que quedaron destruidas después del saqueo de los últimos 20 años".
Asimismo, el mandatario anunció que la Renta Dignidad, un bono que reciben los adultos mayores, aumentará de 350 a 500 bolivianos, mientras que el Bono Juancito Pinto, destinado a estudiantes, subirá de 200 a 300 bolivianos.
Uno de los cambios más significativos es el incremento del salario mínimo nacional, que pasará de 2.750 a 3.300 bolivianos a partir del 2 de enero de 2026. Paz justificó esta medida señalando que, "mientras estabilizamos y le damos un nuevo futuro a la economía, protegeremos a quienes más lo necesitan".
El presidente también anunció la eliminación de los subsidios a los combustibles, una decisión que, según él, forma parte de un "decreto con un corazón social firme" para reconstruir la economía del país.
Estas medidas se enmarcan en un contexto de crisis económica y social en Bolivia, agravada por la pandemia de COVID-19 y la inestabilidad política de los últimos años. El gobierno de Paz busca, a través de estos cambios, brindar un mayor apoyo a los sectores más vulnerables de la población y sentar las bases para una recuperación económica sostenible.
