Los días previos a la Navidad son un momento de preparativos y anticipación, pero sin duda el clímax de las fiestas es la cena del 24 de diciembre. Según los expertos, esta reunión familiar no solo se trata de la comida, sino también de crear el ambiente apropiado para disfrutar en compañía.
"La cena de Navidad es uno de los momentos más importantes de las fiestas", afirma Gina Lanzeby, una premiada mujer de negocios que ha sido clave en la introducción del feng shui en el Reino Unido. "Las personas reciben nutrición no solo de los alimentos que toman, sino también de la compañía que comparten".
En Guatemala, la tradición navideña gira en torno a platillos emblemáticos como los tamales, el ponche y el pavo o pierna de cerdo. Cada familia tiene sus recetas favoritas, pero los expertos coinciden en que la clave está en la adecuada marinación y cocción de la carne.
La chef Mirciny Moliviatis comparte su receta para una deliciosa pierna de cerdo. Primero, se hacen incisiones en la carne y se rellena con trozos de chorizo, longaniza, alcaparras y aceitunas. Luego, se cubre con una mezcla de sal, pimienta, mostaza, laurel, tomillo, vino tinto y caldo de res, y se deja marinar toda la noche.
Al día siguiente, se cocina la pierna cubierta con papel aluminio durante los primeros 90 minutos, para que el vapor y los jugos mantengan la carne tierna. Posteriormente, se retira el papel, se baña la carne con los jugos del fondo de la bandeja y, si se desea, se le puede dar un barnizado. Finalmente, se devuelve al horno por una hora más.
El tiempo de cocción estimado es de 20 minutos por libra, por lo que una pierna de 10 libras (5 kilos) requiere aproximadamente tres horas y media a una temperatura de entre 325 y 350 grados Fahrenheit (165-177 C). Si se prefiere una corteza más crujiente, se puede espolvorear azúcar morena antes de finalizar la cocción.
Además de la carne, las guarniciones tradicionales pueden incluir puré, arroz, vegetales asados y ensalada. Con los jugos del fondo de la bandeja, también se puede preparar una deliciosa salsa espesa.
Más allá de los platillos, los expertos resaltan que lo verdaderamente importante de la cena navideña es crear el entorno apropiado para disfrutar en familia y con amigos. "No se trata solo de comer, sino de compartir ese momento de unión y nutrición emocional", concluye Lanzeby.
