En un entorno de tasas de interés a la baja, las personas con excedentes deben gestionar el dilema de cómo evitar que disminuya el rendimiento de su dinero. Según expertos, los depósitos a plazo enfrentan el "riesgo de reinversión", ya que cuando vencen los contratos, es difícil obtener la misma tasa de interés y se ven obligados a renovarlos a rendimientos más bajos.
La situación se vuelve más apremiante en circunstancias como la actual, pues hace un año muchas personas destinaron parte de la gratificación a depósitos a plazo de 360 días, cuyo vencimiento se da justamente por estas fechas. Hoy, la tasa promedio de un depósito bancario a ese plazo es de 3.87%, mientras que hace un año estaba en 3.74% y en el 2023 en 4.97%, según datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS). En las cajas municipales la variación es más dramática, pasando de 7.67% a 4.42% y 4.62%.
Ronald Casana, representante del Colegio de Economistas de Lima, advierte que muchas personas con depósitos a plazo no están pendientes de la fecha de su vencimiento, por lo que al finalizar el contrato, las entidades financieras los renuevan automáticamente a la tasa de interés mínima del tarifario, que puede ser de alrededor del 1% anual.
Por ello, Casana recomienda a los ahorristas recurrir siempre a la institución financiera antes del vencimiento de su depósito para negociar mejores condiciones. Sin embargo, aclara que los bancos tendrán un "techo" para negociar, por lo que quizás se les pague un 3.5% anual, en lugar de un 5% que tenían anteriormente.
Según los analistas y ejecutivos del sector financiero consultados, se espera que el próximo año las tasas sigan a la baja. No obstante, en el corto plazo esto se atenuaría por una mayor competencia de las entidades financieras por captar los flujos de liquidez de los retiros de AFP y CTS.












