La comunidad deportiva de Costa Rica y el país entero se encuentran conmocionados por la trágica muerte del corredor Luis Roberto López Angulo, conocido como "Luigi" o "Topo", quien fue atropellado el pasado sábado 13 de diciembre mientras entrenaba en Ipís de Goicoechea.
Luis, de 47 años, era hijo del maratonista olímpico Luis López Roger, quien representó a Costa Rica en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988 y Barcelona 1992. Según relatan sus familiares, Luigi era una persona alegre, jovial y dedicada a su pasión por el deporte. Se preparaba para la carrera San Silvestre que se corre cada 31 de diciembre.
El trágico accidente ocurrió cuando Luis corría por la acera frente a los tanques del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AYA). Un vehículo a alta velocidad invadió la zona peatonal y lo embistió, causando su muerte de forma instantánea.
La hermana de Luigi, Priscilla López, hizo un llamado a la conciencia ciudadana y a la conducción responsable. "Que piensen antes de agarrar un automóvil, si no sé manejar no lo agarro, si estoy tomado no lo agarro, hay lugares que no son para ir a velocidades temerarias", advirtió.
Doña Margarita Moya, suegra de Luis, recordó que el atleta era "una persona de inmensos valores morales y espirituales" y que "todos lo querían" en la comunidad. Además de ser un deportista dedicado, Luigi también era un talentoso cocinero, según relatan sus familiares.
La familia de Luigi ha pedido justicia y que se realice un homenaje a su memoria. Priscilla López invitó a la población a manifestarse en contra de la violencia en las carreteras y a rendir un tributo a su hermano. "Sería muy lindo que la gente y todos los deportistas de Costa Rica hagan una caminata, una marcha, que levanten su voz y usen una camiseta para decir no a la conducción temeraria", expresó.
La trágica muerte de este atleta costarricense ha conmocionado a todo el país y ha puesto en evidencia la necesidad urgente de promover una cultura de conducción responsable y seguridad vial en Costa Rica.
