Investigadores de la Universidad de Cambridge del Reino Unido y del Instituto Leibniz para la Historia y la Cultura de Europa del Este de Alemania han descubierto un sorprendente vínculo entre una erupción volcánica ocurrida en 1345 y el brote de la devastadora Peste Negra que azotó a Europa entre 1347 y 1353.
El equipo de científicos halló una anomalía en la densidad de los anillos de los troncos de pinos de los Pirineos centrales, que solo crecen en verano. Observaron que el crecimiento de estos árboles se detuvo durante al menos tres veranos seguidos desde 1345, lo que sugiere un drástico cambio climático en esa época.
Según los expertos, un volcán entró en erupción en el verano de 1345 y pudo lanzar a la atmósfera 14 millones de toneladas de sulfuros, provocando un enfriamiento global que duró tres años. Esto ocasionó escasez de trigo y cebada en Europa, obligando a los europeos a buscar granos en las estepas de Asia central, donde se originó la bacteria de la peste bubónica.
"Los cambios en el comercio de granos impulsados por el clima, aunque mitigaron la hambruna, introdujeron la bacteria de la peste Yersinia pestis a través de pulgas infectadas que llegaron en los cargamentos de granos", explicó el historiador medieval Martin Bauch.
La rápida dispersión de la peste por gran parte de Europa dio lugar a la segunda pandemia más mortal de la historia premoderna, cobrando entre 80 y 200 millones de vidas.
"Fue una auténtica catástrofe climática la que desencadenó esta crisis sanitaria sin precedentes", señaló Raúl Sánchez, de la Universidad Pablo de Olavide, experto en dendroclimatología.
Los investigadores también encontraron en registros históricos referencias de un prolongado oscurecimiento del cielo en esa época, debido a una reducción de la luz solar y un aumento de la nubosidad, así como evidencias de erupciones volcánicas en años previos a la pandemia.
Este hallazgo demuestra cómo los cambios climáticos extremos pueden tener consecuencias devastadoras a escala global, con impactos que van mucho más allá de lo ambiental. La Peste Negra fue una de las mayores tragedias de la humanidad, y ahora sabemos que tuvo su origen en una catástrofe natural.











