En un nuevo episodio de la represión del gobierno de Nicolás Maduro contra voces críticas, el director del medio digital Punto de Corte, Nicmer Evans, fue detenido este sábado en Caracas por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
La detención de Evans, un reconocido politólogo y analista, fue denunciada por su esposa y diversas organizaciones no gubernamentales que documentan la persecución sistemática de opositores al régimen chavista. Según el Foro Penal, Venezuela cuenta con al menos 889 "presos políticos" en la actualidad.
Evans alertó en sus redes sociales que fue visitado por agentes del Sebin, quienes le solicitaron acompañarlos para una "entrevista", a pesar de no contar con una orden judicial. Un video grabado por vecinos muestra cómo el periodista fue subido a una camioneta estacionada frente a su residencia.
"Dicen que van a realizar una entrevista, yo voy a ir voluntariamente a esa entrevista. Esperemos ver cuáles son las consecuencias de esto", dijo Evans en el video, en el que también afirmó: "Voy a dar la cara, no tengo nada que temer".
Sin embargo, los servicios de inteligencia venezolanos han utilizado en el pasado el pretexto de las "entrevistas" para cometer "desapariciones forzadas", según denunció Marino Alvarado, coordinador del equipo jurídico de la ONG Provea.
La detención de Evans fue confirmada por su esposa, Marta Cambero, quien exigió a las autoridades información sobre su paradero y alertó que el periodista requiere de un estricto tratamiento médico por un cuadro de hipertensión.
Evans ya había sido detenido en 2020 y permaneció 51 días preso, hasta que fue liberado junto a más de 100 "presos políticos" que recibieron un indulto del gobierno. Según el sindicato de prensa, al menos 20 periodistas y trabajadores de medios de comunicación se encuentran actualmente detenidos en Venezuela.
La detención de Evans se produce en un contexto de creciente represión contra voces críticas al gobierno de Maduro. Tan solo esta semana, 33 sindicatos venezolanos denunciaron que en los últimos años unos 180 trabajadores han sido víctimas de "detenciones arbitrarias" y "desapariciones forzadas", incluido el secretario general del mayor sindicato del país.
