El Gobierno nacional anunció hoy un incremento salarial del 15% para todos los trabajadores del sector público, en un intento por paliar los efectos de la alta inflación que azota al país.
La medida, que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2026, beneficiará a más de 3 millones de empleados estatales, incluyendo a docentes, personal de salud, fuerzas de seguridad y administrativos, entre otros.
"Entendemos la difícil situación económica que atraviesan nuestros trabajadores y por eso hemos decidido otorgar este aumento salarial por encima de la inflación proyectada", declaró el ministro de Economía, en conferencia de prensa.
Según las proyecciones oficiales, la inflación para el próximo año se ubicaría en torno al 60%, por lo que el incremento del 15% en los sueldos públicos busca garantizar un mejoramiento real del poder adquisitivo de los estatales.
"Este es un esfuerzo importante del Estado para cuidar el bolsillo de nuestros trabajadores y sus familias. Sabemos que aún queda mucho por hacer, pero este es un paso en la dirección correcta", agregó el funcionario.
La medida llega en un contexto de creciente malestar social por la pérdida de poder adquisitivo de los salarios, lo que ha derivado en múltiples protestas y reclamos de diversos sectores.
Analistas consultados consideran que el aumento salarial anunciado, si bien representa un alivio para los trabajadores públicos, probablemente no alcance para compensar la inflación proyectada, lo que mantendría la presión por nuevos incrementos en el futuro.












