Una serie de atropellos ocurridos entre el sábado y el domingo en diferentes zonas de Costa Rica dejaron un saldo de cinco peatones fallecidos, dos de ellos registrados en cámaras de vigilancia.
El primer incidente ocurrió al mediodía del sábado en Ipís de Goicoechea, cerca de los tanques del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AYA). Un hombre de apellido López, de 47 años, que andaba corriendo por la acera, fue impactado por un automóvil que se salió de la vía. Las autoridades realizaron la prueba de alcoholemia al conductor, pero descartaron que estuviera bajo los efectos del alcohol.
Más tarde, a las 10 p.m. del mismo sábado, en Fray Casiano de Chacarita, Puntarenas, una pareja que esperaba para cruzar la calle fue atropellada por un vehículo conducido por un hombre de apellido Barrantes, de 36 años. El fallecido era de apellido Gutiérrez, de 51 años, mientras que su acompañante, de entre 40 y 50 años, aún no ha sido identificada.
A eso de las 2 a.m. del domingo, en Guatuso de Alajuela, un hombre de apellido Duarte, de 37 años, murió en un triple atropello. Según el reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el peatón caminaba en medio de la vía cuando fue impactado por un vehículo, lanzado hacia el carril opuesto, donde fue golpeado por otro auto, y finalmente atropellado por un tercero. Ninguna persona ha sido detenida por este caso.
Por último, un adulto mayor de 80 años, identificado como Paulino Vivas Medina, falleció la madrugada del domingo al ser atropellado por una patrulla de la Fuerza Pública en la comunidad de El Parque, en el cantón de Los Chiles. El oficial conductor, de apellido Díaz, fue trasladado al hospital tras presentar una crisis nerviosa.
Según datos del Ministerio de Obras Públicas, en promedio, 45 personas mueren cada mes en accidentes de tránsito en Costa Rica, siendo las principales causas el exceso de velocidad, la invasión de carril y las imprudencias de los peatones. El año pasado se registraron 513 víctimas mortales, y hasta el 30 de noviembre de 2025 la cifra alcanzaba 497, lo que hace prever que, a finales de diciembre, la situación podría ser aún más grave.
