La parroquia La Unión, en el cantón Quinindé, provincia de Esmeraldas, vuelve a ser escenario de hechos violentos. En menos de 24 horas se registraron dos asesinatos, sumándose a una serie de crímenes que han marcado las últimas semanas en esta localidad.
La noche del sábado 13 de diciembre de 2025, una balacera irrumpió en la tranquilidad de un billar ubicado en el centro de La Unión. Según testigos, varios disparos se escucharon en el establecimiento, dejando como saldo un muerto y un herido. La víctima mortal fue identificada como Orlando Montaño, maestro albañil y residente de la parroquia, quien habría sido alcanzado por las balas en medio del ataque. Su muerte ha causado consternación entre vecinos y compañeros de trabajo, quienes lo recuerdan como un hombre trabajador y dedicado a su familia.
Apenas horas después, la mañana del domingo 14 de diciembre, otro hecho sangriento sacudió a la población. En la pista de motocross del barrio 5 de Agosto, un hombre fue asesinado con disparos en la cabeza. El cuerpo permanecía tendido en el lugar hasta el cierre de esta nota, generando alarma entre los habitantes que se acercaban con temor a observar la escena. Las autoridades aún no han revelado la identidad de esta segunda víctima.
Estos crímenes se suman a una cadena de asesinatos ocurridos en La Unión durante diciembre. El pasado 5 de diciembre, Jipson Segura fue atacado a tiros mientras conversaba con amigos en la esquina de su casa, en el sector Barranquilla. Además, el 3 de diciembre, Jimmy Valencia fue asesinado en la zona rural de La Loma del Cóndor, en la vía Playa de Muerto.
La reiteración de hechos violentos ha encendido las alarmas en la comunidad, que reclama mayor presencia policial y acciones concretas para frenar la ola de inseguridad que azota a la parroquia de La Unión. Vecinos y autoridades locales exigen una respuesta urgente ante esta preocupante situación.
